Doctorado en Antropología- Áreas de investigación

Los primeros antropólogos registraban con cuidado el bagaje "material" al mismo tiempo que otros aspectos de los pueblos estudiados. Desde mediados del siglo XX los estudios pusieron énfasis en aspectos simbólicos de la cultura y en las relaciones sociales y sólo recientemente ha reaparecido el interés por la cultura material y los intercambios mediados por, y con, objetos. Por ejemplo, hay ahora nuevas discusiones sobre los "dones"; planteos sobre enfoques metodológicos que siguen "la vida social de las cosas" (Appadurai, 1987) y reconsideración de las esferas de intercambio. También han surgido nuevos enfoques sobre el rol de las máquinas en la vida social en momentos en que aquellas no sólo reemplazan las manos, sino también los cerebros humanos (Castells, 1996; Coriat, 1992; Poster, 1996 y otros).

Las ideas de modernización y progreso que caracterizaron al siglo XX resultan en desaliento para conservar o al menos registrar las habilidades y los quehaceres técnicos. Más aún, no existen muchos estudios que evalúen comparativamente las distintas tecnologías fuera del obvio parámetro de productividad medida en moneda, superficie u horas-hombre y a su despliegue en el tiempo (medidas a veces dudosas de "eficiencia"). Un acercamiento así a la técnica deja de considerar muchos e importantes aspectos de sistemas económico-sociales complejos que la antropología puede tratar.

El quehacer técnico, los saberes y materiales han sido tratados como asuntos económicos o tecnológicos desprendidos de muchos de sus rasgos, consecuencias y connotaciones sociales. Las ciencias económicas centran su foco - antes y ahora - en los intercambios monetarios y, del mismo modo, los ingenieros se interesan en las técnicas más recientes que arrasan con maneras anteriores de hacer y producir. La sucesión de generaciones tecnológicas no es conmensurable con el tiempo de las generaciones y el aprendizaje humanos (y, mucho menos aún, con las instituciones escolares).

En resumen, pocos estudios han asumido la importancia de los asuntos involucrados alrededor de las tecnologías y conocimientos necesarios para la producción y subsistencia económica ya sea la estrictamente "material" o mediada por moneda; así ha quedado casi en tierra de nadie el análisis y seguimiento de los saberes y las prácticas técnicas, los cuales permanecen o desaparecen como consecuencia de los planes de desarrollo de corto plazo o las diversas y hasta eventuales demandas en los mercados. También se ha ahondado la brecha entre la antropología y las ciencias y disciplinas técnicas.

Cambios en prácticas de producción y de trabajo por influencia de nuevas tecnologías.

Dr. Óscar González
“Cultura material contemporánea en el Occidente de México. Desarrollo de la cultura científica”

La línea de “cultura material contemporánea” se enfoca en las características locales de los saberes y prácticas técnicas; de ellos se estudian la adecuación, adopción y apropiación. En el desarrollo de cultura científica regional se analizan las diferencias microregionales de recursos, así como las capacidades que los jóvenes demuestran en desempeños académicos científicos relacionándolas con variables socioeconómicas y culturales.

Las diferentes líneas de investigación en esta área están todas dedicadas al estudio etnográfico de la producción cultural. La etnografía es una técnica de descripción, registro y análisis que permite la indagación de diferentes formas y prácticas culturales estableciendo sus interrelaciones, transformaciones y lógicas así como sus institucionalizaciones en sistemas normativos (educativos, religiosos, jurídicos, artísticos-estéticos-literarios, etcétera). Pero un trabajo etnográfico es, a la vez, una forma de producción cultural también institucionalizada en sistemas normativos: en el estudio etnográfico de objetos culturales se crea otra objetivación cultural.

Esta realidad reflexiva del estudio etnográfico indica la importancia de nuestro enfoque común en el estudio de la producción cultural. Cuando la cultura es estudiada no como producto sino como producción, el concepto de poder se vuelve inseparable del concepto de cultura y las realidades regionales del poder (es decir, sus dimensiones espaciales) nos exigen repensar el concepto: Cultura se vuelve cultura regional. Este razonamiento metodológico nos ha llevado a conformar un área de investigación compuesta de varias líneas de investigación antropológica que comparten el problema metodológico de las relaciones entre etnografía y cultura regional.

Desde el inicio del Centro de Estudios Antropológicos, una parte de la investigación y la docencia ha girado en torno al problema de la producción cultural y su organización en el tiempo histórico y el espacio social. En 1979, los investigadores Luis María Gatti (q.e.p.d.) y José Lameiras desarrollaron proyectos sobre cultura popular en relación a dos procesos: 1. la representación y re-invención de identidades locales (Lameiras) y 2. las configuraciones regionales de espacio y la diferenciación socioeconómica y ocupacional (Gatti). En la docencia, la temática de la cultura, los parámetros de su producción y consumo, y sus dinámicas (sincretismo, “hibridación”, transculturación, homologación, refuncionalización, entre otras) se abarcaron mediante el contraste e interrelación de dos corrientes: 1) el paradigma norteamericano de “culturalismo” con su herencia del idealismo alemán y su papel en la formación del pensamiento antropológico en México y 2) las teorías de cultura que combinan la fenomenología con cuestiones etnológicas o históricas de estructuración asociadas con estudiosos franceses como Le Goff, Lévi Strauss y Bourdieu. Otro aspecto de esta problemática desarrollado desde 1979 (con las contribuciones originales de Luis María Gatti) tiene que ver con el problema de la etnografía como una forma de producción cultural en sí. Este tema siempre ha sido abarcado en los seminarios de investigación y, desde 1993, se ha vuelto el enfoque central del seminario de investigación IV que, después de la primera temporada de trabajo de campo de los estudiantes del posgrado, está dedicado a la elaboración de argumentos etnográficos. El problema de la etnografía como forma de producción cultural, también, se refleja en la preocupación por el desarrollo y mantenimiento de fuentes de estudio etnográfico, la búsqueda de nuevas fuentes en los géneros de habla o la producción literaria y en el análisis de diferentes expresiones religiosas. De manera congruente con estos intereses y preocupaciones metodológicas en la actualidad hemos formalizado el área de Cultura Regional y Etnografía

Dres. Andrew Roth Seneff y Cristina Monzón
“Lengua y cultura en la configuración p’urhépecha de espacio social”

Dr. Paul M. Liffman
“Dimensiones históricas, etnológicas y museológicas de la territorialidad huichola”

Archivo Oral P’urhépecha: Las fuentes orales indígenas constituyen un recurso cultural en gran parte desconocido y desprotegido. Este proyecto de larga duración está dedicado a la creación de un archivo oral p’urhépecha y al análisis de los materiales con enfoques que van desde el examen de problemas sociolingüísticos hasta el interés central en la historia cultural a través de la interpretación de fuentes narrativas como formas de producción cultural.
Cultura popular p’urhépecha y representaciones de espacio social. Mediante el análisis e interpretación de relatos, cuentos y testimonios p’urhépechas procuramos examinar la relación entre moralidad e intereses, por un lado, y, por otro, la representación de espacio social en la cultura popular. Argumentamos que 1) los intereses individuales son, como decía Max Weber, “recíprocamente referidos” y, por lo tanto, hay una relación entre los marcos morales recíprocos en la cultura popular y la representación legítima de intereses; 2) la emergencia de nuevos sujetos implica nuevas formas y condiciones de objetivación y por lo tanto intereses que se puede enmarcar de manera negativa o ambigua dentro de las narrativas prexistentes de grupos tradicionales, y 3) los nuevos sujetos y nuevos intereses definen y son definidos por posiciones en un espacio social pluridimensional tanto dentro como más allá de la comunidad.
Procesos etnolingüísticos en p’urhépecha colonial: Las fuentes escritas en lengua tarasca durante la colonia constituyen un acervo casi totalmente desconocido. El análisis lingüístico busca establecer el desarrollo histórico de la lengua, las regiones dialectales, las normas gráficas y estilísticas así como las nuevas adapataciones a modalidades discursivas que responden a las necesidades socioeconómicas, jurídicas, etc.
La tradición historiográfica de configuración de dominio en la Historia Tolteca Chichimeca: En la historia cultural de las etnias mexicanas con orígenes mesoamericanos todavía no hemos explorado y desarrollado adecuadamente las fuentes narrativas escritas y orales. Este estudio de la Historia Tolteca Chichimeca (documento de pictógrafos y nahua escrito en letras latinas que data de alrededor de 1555) está dedicado a identificar las normas historiográficas nahuas empleadas en una narrativa elaborada en Cuauhtinchan (Estado de Puebla) en el contexto conflictivo de litigio sobre derecho a tierras (fines de la Primera Audiencia).

Mtro. Carlos Antaramián
“La representación del armenio en diáspora”
Aún cuando casi siempre han sido representados como Estados-Naciones, los protagonistas de la historia de la modernidad y sus construcciones durante el siglo XX son múltiples y heterogéneos. En este contexto, la memoria y la rememoración del genocidio de los armenios a fines del Imperio Otomano y el diáspora de los sobrevivientes durante todo el siglo XX han sido negado y reprimido a la vez que han servido para la representación de una “armeniedad” como una unidad imaginada. Esta investigación etnográfica procura indagar la construcción conflictiva de las comunidades de armenios en diáspora con hincapié en los temas culturales de la rememoración y su operación en la conformación de identidades narrativas.

Mtro. Luis Arturo Ávila
“Creación local de instituciones de educación superior privada y cultura regional: Zacapu y Zamora, 1980-2003”

La investigación pretende explicar la formación de dos instituciones de educación superior privadas, captando la formación histórica de los campos de fuerza regionales y nacionales en los que han surgido las escuelas. Al contrastar dos casos con cercanía geográfica se pone el enfoque en las particularidades de las ideologías y tradiciones que organizan la diversidad cultural, estableciendo jerarquías entre grupos sociales, constitutivas de los cambios económicos y políticos. Se explora un marco de análisis de la cultura regional y, a la vez, se busca un enfoque para comprender adecuadamente los principios que predominantemente dan orden a las interacciones sociales dentro de las instituciones de enseñanza superior privadas, en tanto que marcos históricamente construidos en los que convergen múltiples grupos sociales.

En el Centro de Estudios Antropológicos de El Colegio de Michoacán las materias “Evolucionismo y Ecología Cultural” y “Estudios Regionales” se han impartido desde el inicio del Programa de Maestría en Antropología Social. La primera figura entre los paradigmas importantes de la antropología, en cuyo campo la disciplina ha contribuido al análisis de la relación entre sociedades y culturas y la naturaleza. La segunda atiende a problemas en la formación de sociedades y culturas en espacios concretos.

La “Ecología cultural” se propone como categoría general que incluye los acercamientos teórico-metodológicos de la antropología y de las ciencias que han contribuido al registro, descripción, análisis e interpretación de formaciones socioculturales en el espacio y el tiempo. Se encuentra en la intersección de la geografía y otras ciencias de la naturaleza y la historia y adquiere su especificidad en sus objetos, que son la sociedad y la cultura. La Ecología Cultural privilegia el estudio de la organización social alrededor de la obtención de la subsistencia y el uso de los recursos naturales y de las formas culturales histórica, arqueológica y directamente documentables y observables. Comprende cinco aspectos: a) económicos -relativos a la secuencia producción-distribución-consumo-, b) políticos -procesos diacrónicos de diferenciación en el acceso a recursos y toma de decisiones y sincrónico-descriptivos de configuraciones estructurales-, c) culturales -cultura material (tecnología: objetos instrumentales y de consumo, construcción del paisaje), cosmovisiones, ideologías, percepciones colectivas y símbolos-, d) de geografía y paisaje y e) físico-biológicos. El énfasis está en las relaciones entre estos aspectos y los procesos de cambio sociocultural.

Dres. Brigitte Boehm Schoendube †, Juan Manuel Durán Juárez, Martín Sánchez Rodríguez y Alicia Torres Rodríguez
"La lectura del paisaje cultural y los cambios en el uso y manejo del agua en la cuenca Lerma-Chapala-Santiago"

En este proyecto pondremos énfasis en el desarrollo de las técnicas de la lectura del paisaje cultural, cuya metodología hemos venido desarrollando y poniendo a prueba anteriormente.

Se trata de un análisis riguroso de documentos gráficos e históricos y actuales, a fin de correlacionar los hechos y los procesos socioculturales con sus impactos en la geografía regional. Continuamos con el análisis en varios niveles: la macrocuenca en general y tres subregiones más particulares, que son: la cuenca del lago de Chapala y las correspondientes a la zona de los ríos Lerma y Duero, bajo la responsabilidad de Brigitte Boehm y Martín Sánchez Rodríguez; la del alto río Santiago, de Juan Manuel Durán Juárez, Alicia Torres Rodríguez y Gabriela Guadalupe Ruiz Briseño, y la de los afluentes del Lerma en Guanajuato, a cargo de Martín Sánchez Rodríguez.

Mtra. Ma. del Pilar Domínguez Paredes
“La construcción de las cadenas mercantiles en la región aguacatera de Michoacán”

La investigación aborda el estudio de los procesos de producción y comercialización del aguacate que se manifiestan al interior de la amplia región productora de Michoacán. La región de estudio ofrece un marco o contexto para analizar la comercialización del aguacate hacia el mercado nacional e internacional. El estudio se sedimenta en el análisis de las redes de relaciones sociales, económicas, políticas y culturales que se construyen en el interior y exterior de la región aguacatera. Para llevar a cabo este objetivo la investigación etnográfica se enfoca en el centro poblacional aguacatero de Peribán que ocupa el segundo lugar en el acopio y la comercialización del fruto en la región, así como el tercer lugar en la estructura jerárquica productiva. Asimismo este trabajo analiza el papel económico que desempeñan los empacadores de aguacate de la cabecera municipal de Peribán de Ramos, quienes particularmente comercializan el aguacate en el mercado nacional.

Mtro. Francisco Javier López
“Desarrollo agrícola y relaciones de poder en el Valle de Yurécuaro-Tanhuato”

Se trata de entender y explicar el proceso desigual de expansión hortícola realizada con tecnología de punta (niveladoras láser, acolchados, riego por goteo, semillas mejoradas, invernaderos, etc), el cual ha traído novedosas relaciones sociales así como la aparición de nuevos actores (jornaleros, ingenieros, comisionistas) y grupos de poder en medio de una política estatal de ahorro de agua.

Mtra. Verenice Ramírez
“Tollan: desarrollo ecológico colonial, siglos XVI-XVII”

La investigación de tesis pretende reconstruir la historia del surgimiento y consolidación de dos cacicazgos indígenas en la región de Tula en el siglo XVI, así como las relaciones que los caciques entablaron con encomenderos y mercedarios españoles para el aprovechamiento de la mano de obra indígena y los recursos. El análisis se centra en el cambio en las formas socioculturales y políticas derivadas de la introducción de nuevos cultígenos y animales, de tecnologías e instituciones, así como en la reestructuración económica, laboral y política de la sociedad regional y de sus vínculos con la ciudad de México y la Corona Española. El trabajo se realiza con documentación primaria de archivos y documentos publicados y con materiales gráficos que permiten visualizar los cambios en el paisaje cultural.

Mtro. José Luis Rangel
“La ribera sur del lago de Chapala y su transformación.Tizapán el Alto y Cojumatlán: un paisaje de poder político”

El objetivo central de este proyecto es explicar la transformación del vaso lacustre y ribera sur de la laguna de Chapala vía la práctica agrícola de los campesinos–pescadores, ejidatarios, pequeños propietarios rurales y coamileros en relación a los estrechos vínculos de lealtad, amistad y compadrazgo que han establecido con los representantes de las instituciones federales como son la Comisión Nacional del Agua (CNA), Secretaría de la Reforma Agraria (SRA), y Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), para poder acceder o no de manera informal: al usufructo de las tierras de la zona federal, tierra firme, perforación hormiga de pequeños pozos y pozos profundos en la zona federal y terrenos ejidales, respectivamente, además de la deforestación de las áreas cerriles mediante permisos para cambio de uso de suelo. A partir de la lectura del paisaje, (entendiendo por ello el análisis de la expresión material de la cultura en su dimensión económico–política que precisa relaciones sociales asimétricas horizontales y verticales imperantes entre los sujetos en cuestión), entrevistas abiertas, hemerografía, documentos de archivo, cartografía histórica (cartas topográficas, hidrológicas, fotografía aérea); y trabajo etnográfico, se pretende reconstruir de manera comparativa en Tizapán el Alto, Jalisco, y Cojumatlán de Régules, Michoacán, el proceso de cambio en el paisaje.

El objetivo de esta área es estudiar, desde el nivel local, los distintos impactos que el proceso de reforma del Estado mexicano ha tenido sobre la sociedad en los últimos años. Se ocupa del surgimiento y redefinición de antiguas y nuevas identidades y sujetos históricos. Así también interesan los procesos de reconfiguración de las estructuras y grupos de poder locales que se han generado en el contexto de la modernización política y de las transformaciones económicas.

Esta área de investigación pretende seguir a la vez que renovar la tradición de la antropología mexicana que privilegia el enfoque regional como herramienta de estudio y reflexión para el análisis de los procesos políticos locales. Se inscribe dentro de la corriente de estudios que inicia con el trabajo pionero de Aguirre Beltrán (Formas de Gobierno Indígena) y se continúa con equipos como los de Andrés Fábregas en los Altos de Jalisco, de Guillermo de la Peña en el Sur de Jalisco; y de Arturo Warman y Roberto Varela en el estado de Morelos. Vista desde esta tradición, la producción antropológica mexicana generó importantes etnografías sobre las regiones de México y de los procesos políticos locales. Su principal preocupación fue la de mostrar la existencia de una gran diversidad de prácticas culturales, formas de gobierno y procesos de regionalización por medio de renovados enfoques teóricos que en ese momento estaban siendo discutidos en otros ámbitos académicos. Si por medio del enfoque regional en la tradición antropológica mexicana se demostró que México era un país lleno de diversidades y procesos totalmente divergentes, también adolecieron de importantes limitaciones; no así el estatus epistemológico mismo de la región como recurso metodológico. La región como herramienta metodológica para el acceso al conocimiento de dichas diversidades ha sido hoy día replanteada como consecuencia de procesos sociales, políticos y culturales que han cobrado vida producto de fenómenos como el de la transnacionalización, globalización económica y reforma del Estado. Los impactos que han tenido tales tendencias se han mostrado en fenómenos como el de la redefinición de procesos de identidades locales, tradiciones culturales, etnicidades, movimientos emergentes y formas culturales de hacer política.

El análisis de los procesos de identidad en su relación con la globalización y la transformación misma del Estado entendido como aparato cultural, han dado nueva vida a los estudios de la política local como bien lo ha señalado Joan Vincent. Las tradiciones culturales, rituales y símbolos asociados con acciones políticas cotidianas y concretizadas en culturas políticas pueden definir como el poder es afirmado y confrontado en y desde las prácticas sociales.

Dr. José Eduardo Zárate Hernández
“Transnacionalización, etnicidad y movimientos emergentes en el Centro de Michoacán”

El proyecto analiza las principales transformaciones en la cultura y la política que se han venido dando en la Cuenca Lacustre de Pátzcuaro y la región aledaña a la ciudad de Morelia a partir del proceso de reforma del estado mexicano y de la inclusión de grandes volúmenes de la población local en el proceso de migración internacional. Se ocupa también del surgimiento de nuevos actores sociales y del reacomodo de los grupos tradicionales en el nuevo contexto político.

Dr. Marco Antonio Calderón Mólgora
"Ritual político, ceremonias cívicas y transición en México: el caso de la Sierra P’urhépecha"

Este proyecto plantea analizar dos períodos relevantes de la historia de México tomando como eje de análisis la ritualidad política. La primera etapa se refiere a la transición del estado liberal al estado populista posrevolucionario. El segundo período se refiere a la transición del estado populista al estado neoliberal y a la crisis de la "hegemonía revolucionaria institucional". La hipótesis aquí es que la implementación de las políticas neoliberales en el ámbito económico y la reforma política del estado promovida por las élites federales se reflejan en las características y en el significado de algunos rituales y ceremonias del México contemporáneo.

Salvador Maldonado Aranda
"Cambio político en México: partidos políticos, movimientos sociales y procesos de democratización."

El objetivo principal del proyecto de investigación es analizar los procesos de formación y reconstitución del poder local y regional a partir de un seguimiento de las formas de lucha y negociación entre diversos grupos de poder, partidos políticos y movimientos sociales en el ámbito político-electoral. De forma paralela, nos interesa examinar las implicaciones de estos procesos en el desarrollo de la democracia mexicana. Por medio de tales análisis esperamos rediscutir las múltiples maneras en que la democratización contribuye –o no- a instaurar nuevas formas de ciudadanía y culturas políticas en contextos locales.

Mtro. Patricio Barrientos
“Construcción de sujetos indígenas en la Guadalajara Poscolonial”

La existencia de una dualidad entre el fondo poscolonial-estamental del orden social y la fachada “moderna” de la misma (generalmente vinculada al desarrollo económico) permite la existencia de construcciones sociales particulares como las que definirían al indígena como el otro que debe entrar en la sociedad nacional, ya sea como “sujeto en redención”, mano de obra barata en las ciudades o campos, como reserva electoral populista o simplemente como consumidor. Esta configuración social no es un proceso estático ni tampoco mecánico sino que tiene particularidades (dependiendo mucho de la configuración social y del Estado-Nación). Dichas peculiaridades se entenderían bajo qué mecanismos o procesos el sujeto indígena urbano, entendido como marginal económico y social, tiene grados de identificación con la estructura dominante.

Por lo mismo, se observa tanto el proceso de construcción social del sujeto indígena, entendido como un imaginario donde participan los diversos actores hegemónicos como su consecuencia que sería la adopción y adaptación de los imaginarios producidos por el Estado Nacional (entendido este como la suma de intereses y actores hegemónicos, no como un actor en si mismo) por parte de los indígenas (Friedlander, 1975).

Mtra. Nahayeilli Juárez
“‘El muerto parió al santo’: santería y pertenencia religiosa múltiple en la Ciudad de México”

Las dimensiones espaciales de difusión de la santería, expresión religiosa de origen afro-cubano, no se reducen a Cuba; actualmente abarca varios países del continente americano, incluyendo a México. El proyecto intenta analizar y comprender qué factores posibilitan su difusión –particularmente en el Distrito Federal- y la forma en la que sus adeptos se apropian de otras expresiones religiosas y esotéricas de manera simultánea, en una cohabitación religiosa.

Mtra. Silvia Mendoza
“Comunidad indígena, conflicto y poder local en tres comunidades del municipio de Ixmiquilpan, Hidalgo”

Con este proyecto se busca profundizar el análisis del proceso de construcción de las comunidades indígenas hoy en día, para lo cual, desde una perspectiva regional, se aborda el estudio de tres comunidades otomíes que se localizan en el municipio de Ixmiquilpan en el Estado de Hidalgo. Se busca entender cómo algunas comunidades indígenas que comparten características culturales, sociales y económicas semejantes, expuestas a los mismos procesos estructurales, son capaces de producir procesos disímiles de transformación y construcción de lo que es la comunidad indígena. Se tienen tres niveles de análisis: la comunidad, la región y los intermediarios, niveles que se encuentran contenidos en una red de relaciones de dominación cambiantes en el transcurso del tiempo. Se toma al siglo XX como el periodo de análisis por ser una etapa durante la cual las comunidades indígenas quedaron expuestas a una serie de cambios (reforma agraria, acción indigenista, etc.) que la propia dinámica del Estado Mexicano moderno imponía, fenómeno al cual las comunidades enfrentaron, asumieron y reaccionaron.

Mtro. Eric Mercado Arias
“Las disputas por recursos entre ejidatarios de Parácuaro, Michoacán”

En este proyecto se plantea el análisis de una microrregión en el medio rural mexicano, vista desde el ejido Los Bancos, ubicado al norte del municipio de Parácuaro, en Tierra Caliente de Michoacán. El estudio enfatiza la administración y distribución de recursos del grupo de cultivadores, prestando atención a distintos aspectos y contextos como son: región, historia, migración, relaciones con el Estado, formas locales de apropiación y distribución de recursos, entre otros. Los bienes disputados son tierra, agua, prestigio social a través de cargos, distintos apoyos del Estado y otros privilegios que rodean las peculiares relaciones sociales de este ejido. Intervienen personajes de otros ejidos, comercializadores, partidos políticos, instituciones del Estado a nivel federal, estatal y municipal afines con los recursos en disputa, etcétera. La particularidad de estos sembradores es la producción para consumo nacional y externo donde la mayoría de miembros sigue siendo campesinos “pobres” ante un libre mercado internacional.

Mtro. Enrique Javier Rodríguez
“Entre santos y montañas: pentecostalismo, identidad y cambio cultural en una comunidad guatemalteca”

Durante la década de los setenta y los ochenta, el pentecostalismo se convirtió en una de las fuerzas religiosas más importantes en Latinoamérica, después del catolicismo. Entre las opciones protestantes históricas (bautistas, presbiterianos, metodistas, adventistas, etc), el pentecostalismo parece ser el que más rápidamente se ha expandido, sobre todo en las comunidades indígenas y zonas marginadas de las grandes ciudades. Entre todos los países de Latinoamérica, destaca Guatemala, sobre todo por la veloz expansión que han tenido en este país centroamericano las denominaciones de origen pentecostal. Tanto los trabajos clásicos como los realizados en fechas recientes dan muestra de ello.

En ese sentido, esta investigación quiere aproximarse al estudio del cambio religioso entre los mames de la comunidad guatemalteca de Todos Santos, para tratar de explicar cuáles son los factores o causas sociales que posibilitan el cambio de adscripción religiosa entre los indígenas de esta comunidad. Además de los factores económicos, la marginación y los desajustes políticos que ha sufrido este país, se trata de indagar también en otras posibilidades para el análisis del cambio religioso tales como la cosmovisión y las costumbres tradicionales, en tanto elementos que nos ayuden a explicar los cambios, transformaciones o permanencias.

Mtro. Víctor Téllez
“Gobierno local, territorio y ritual en Xatsitsarie/ Guadalupe Ocotán”

La conformación del estado de Nayarit cuyos antecedentes se presentan en la segunda mitad del siglo XIX, con la separación del Séptimo Cantón del estado de Jalisco, afectó el territorio de las gobernancias Wixaritari (huicholas) asentadas en el área del Río Chapalagana. Debido a ello, las relaciones entre las mismas gobernancias se han visto modificadas a lo largo de la historia, influyendo en la dinámica de cada una de ellas de manera independiente.

Esta investigación tiene por objetivo describir la forma en que la modificación del territorio Wixárika ha afectado a la gobernancia y comunidad agraria de Xatsitsarie/ Guadalupe Ocotán, donde la separación del territorio jalisciense (y de la comunidad de San Andrés Cohamiata), la influencia de los misioneros franciscanos, los programas oficiales y la invasión de su territorio por la población mestiza de Huajimic han contribuido a la transformación de sus autoridades locales y su ritualidad.

Esta área de investigación explora las interrelaciones entre procesos de cambio socioeconómico y prácticas culturales de habitantes de México. Enfocados en la región del Occidente, se indagan las diversas maneras en las cuales procesos históricos (tales como los flujos migratorios, la mecanización de la agricultura, la incorporación a mercados de trabajo regionales y extraregionales, la inserción de productores en circuitos internacionales de comercialización, las modificaciones en formas de sustento, etc.) se entretejen con transformaciones en formas y niveles de organización social, particularmente la familia y la comunidad. Dentro de estas transformaciones, la construcción de relaciones e identidades de género y su cuestionamiento en contextos de profundos y frecuentemente vertiginosos cambios socioeconómicos constituye una vertiente central de indagación.

Partiendo de la premisa de que en períodos de acelerado cambio social, los conflictos y tensiones en torno a las relaciones interpersonales afloran con especial intensidad, se estudian dichas etapas históricas para descubrir los mecanismos a través de los cuales determinados grupos sociales proponen, confrontan, internalizan y exaltan ciertos valores culturales a través del discurso y de las prácticas. Por lo tanto, siguiendo la propuesta de Claudia Strauss (1992), hay que captar, interpretar y analizar los mensajes culturales para poder indagar los esquemas cognitivos mediante los cuales los seres humanos construyen e interpretan la realidad.

Las metodologías privilegiadas para captar estas transformaciones en la cotidianeidad de los pobladores son la etnografía y el análisis generacional, las cuales permiten detectar modificaciones en prácticas culturales y buscar sus vinculaciones con procesos de cambio mayores. Merecen especial atención las reformulaciones de los derechos y obligaciones de los miembros del grupo familiar que suelen producirse en situaciones de acelerado cambio social económico y ajuste de prácticas culturales. Conceptualizamos al grupo familiar como una agrupación cuyas acciones encaminadas a su reproducción material y social están motivadas tanto por intereses como por emociones y sujetas a una jerarquía de poder con base en la edad y el género que implica un acceso diferencial a recursos estratégicos. Esta ruptura con la noción de unidad doméstica armónica e igualitaria lleva a explorar a profundidad dinámicas intrafamiliares, relaciones intra e intergenéricas, y relaciones intergeneracionales mediante la observación y la reconstrucción de cursos de vida familiares, especialmente momentos de transición.

Dra. Gail Mummert
"Cambios en la organización familiar en un contexto de emigración masculina, trabajo asalariado femenino y agricultura comercial: estudio de caso en Quiringüicharo, Michoacán"

Este proyecto analiza los cambios en los patrones de formación y organización de las familias rurales en una comunidad agrícola michoacana que ha sido escenario de tres procesos de cambio socioeconómico en las últimas décadas: la emigración masculina, el trabajo asalariado femenino y la comercialización de la agricultura. Muestra cómo las relaciones de género y generacionales se están redefiniendo conforme los miembros del grupo familiar cuestionan sus derechos y obligaciones frente a los demás.

Mtra. Ana Cristina Ramírez
"El juego del valor. Varones, mujeres y bestias en la charrería en Morelia desde 1923"

¿Cómo se han relacionado humanos -varones y mujeres- y otros animales en un juego caracterizado por buscar un efecto estético haciendo uso medido y sancionado de la violencia? El objetivo es hacer una crítica de la visión trascendente de la relación naturaleza-cultura (lo natural como peldaño inferior del ámbito humano/cultural) describiendo y analizando las formas diferenciadas de agencia en la charrería de tal manera que, desde el marco teórico de la antropología interpretativa, sea posible comprender el papel de la violencia en la co-construcción de los hábitos comunicativos en la propuesta estética charra. Se parte de la hipótesis general que con los animales no humanos co-construimos relaciones sociales específicas de cada contexto histórico. Una perspectiva diacrónica cuestionará lo natural de su animalidad como dato absoluto, pues durante el siglo XX se han transformado notablemente los espacios donde humanos y otros animales entablan relaciones –ciertamente asimétricas- así como los estilos de consideración y trato hacia estos últimos. La fecha de inicio del período estudiado (1923) corresponde al año de fundación de la Asociación de Charros de Morelia, una de las más antiguas de la República.

Mtra. Flor Urbina
“Movilidad social e identidades cambiantes entre empleadas de mostrador en Zamora, Michoacán. 1950-2003”

El estudio dirige la mirada específicamente a un subconjunto de las llamadas empleadas de mostrador: las de las tiendas que venden artículos para el arreglo personal. El análisis busca vincular las prácticas de consumo y las trayectorias laborales con las aspiraciones de ascenso social y con la adopción de patrones ideales de identidades femeninas. Para analizar las prácticas cotidianas de este contingente de mujeres trabajadoras se abarcan las siguientes tres líneas de indagación: 1) En el espacio laboral, las relaciones que establecen con los propietarios de las tiendas, con clientes y con compañeras de trabajo, así como las diferentes posiciones que van ocupando en su trayectoria como empleadas de mostrador; 2) Las prácticas de consumo y la construcción de estilos de vida que expresan identidades sociales; y 3) Las relaciones que configuran como parte de las identidades de género, en donde se expresan los cambios y las transformaciones de las prácticas ejecutadas por mujeres.

Los rituales, prácticas y creencias religiosas han sido objeto tradicional de estudio de la Antropología Social. Actualmente los antropólogos que analizan el tema se enfrentan a un campo en constante transformación y construcción, donde el objeto de estudio se ubica en contextos de gran complejidad, dificultando la delimitación de “lo religioso”. Pese a la notable importancia que aún mantienen las perspectivas clásicas, los cambios que se están suscitando actualmente en las sociedades, en las iglesias y en menor proporción en las creencias y prácticas religiosas nos obligan a intentar interpretaciones más complejas. Tópicos tradicionales como rituales y cultos se añaden y mezclan con los de modernidad, secularización, poder, fundamentalismos, espacios trasnacionales, globalización y con la emergencia de nuevas prácticas y difusas concepciones religiosas. Como nos dice M. Marzal en su libro Tierra Encantada (2002), el estudio de procesos, prácticas y creencias religiosas en Latinoamérica presenta mayor complejidad debido a que en ésta la religión tiene múltiples rostros, a pesar de la secularización y del “desencantamiento” del mundo. Ante este marco tan amplio de investigación, el Área de Antropología de la Religión se enfoca en tres líneas:

Este proyecto, ubicado espacialmente en una de las regiones más pobres y áridas del estado, la de la Sierra Gorda, hará eco de la influencia regional que tuvo la Cristiada en tanto movimiento social de cariz religioso, y de sus relaciones en la conformación del poder político secular.

Además la investigación anterior El camino de los santos. Historia y lógica cultural otomí en la Sierra Gorda guanajuatense constituye un antecedente y referente importante para la discusión de varios de los puntos señalados en las líneas del área, sobre todo en lo que respecta al ritual, los sistemas de cargos y la generación de identidades.

Practicas , creencias e identidades religiosas de los migrantes de Cortazar, Guanajuato.

El proyecto analiza los procesos migratorios en esta región que forma parte del corredor industrial en el Bajío guanajuatense. Abarca temáticas como fiestas, peregrinaciones, participación religiosa e identidades en el municipio de Cortazar y presta especial atención a la relación que existe entre las condiciones sociales y materiales en que viven y trabajan los migrantes cortazarenses en EU con la forma en que reproducen sus prácticas culturales y creencias religiosas en contextos de coexistencia con distintas razas, culturas y lenguas en ese país.