Adúlteros.
Categoría general: Delincuentes.

El adulterio era uno de los delitos que tanto el petamuti como el cazonci juzgaban. En principio, parece ser que era castigado con la muerte, aunque la Relación proporciona datos contradictorios y no queda claro quién recibía la pena. Por una parte se dice que los hombres dejaban a sus mujeres cuando éstas cometían adulterio y, en efecto, el sacerdote que casaba a los señores le recomendaba al novio que, en caso de que su mujer cometiera adulterio, la perdonara y la enviara a su casa "mansamente" sin hacerle daño. Sin embargo, el mismo sacerdote también les recordaba a los contrayentes (especialmente a la mujer) que podrían morir si cometían adulterio. En las bodas de la "gente baja" el padre de la novia también se encargaba de advertirle a su hija que no cometiera adulterio porque de hacerlo ella misma buscaría su muerte y se añade el dato de que también sus parientes, incluido su padre, morían por ello. Por otra parte, el sacerdote que introducía a un nuevo cacique en su pueblo le advertía a la gente que la pena para los adúlteros era la muerte y del cazonci se dice que mandaba matar a los adúlteros, lo cual parece significar que tanto la mujer adúltera como el hombre con el cual había cometido adulterio morían. Esta interpretación se refuerza porque en el juicio por adulterio tanto el hombre como la mujer eran los acusados. El marido que descubría a su mujer con otro hombre les rasgaba a ambos las orejas y les quitaba las mantas, las cuales presentaba como pruebas durante el juicio, tal como se representa en la lámina 9. Cuando Xoropiti y Tarequazingata cometen adulterio con la mujer de Tariacuri ellos mismos se rasgan las orejas, como hacían con los adúlteros, para argumentar que Tariacuri era el agresor pues había "inventado" que se echaban con su mujer. Aparentemente en este caso Tariacuri pudo haber matado a la adúltera, pero se contuvo por miedo a que su suegro Chanshori, en ese momento más fuerte que él, le declarara la guerra (lo cual eventualmente sucedió cuando Tariacuri tomó otras mujeres y dejó a la hija de Chanshori). En cambio, cuando Caricaten se entera de que una de sus mujeres mantenía relaciones ilícitas con Aramen, manda matarlo y también manda sacrificar a las hermanas de Aramen.

Otras referencias menos claras de adulterio parecen confirmar que el hombre que lo cometía moría por ello: cuando Tariacuri le envía a Zurunban el cuerpo descuartizado de Naca, le hace creer que se trata de un esclavo al que sacrificó porque se "juntó" con una de sus mujeres (f. 84); también Zinzicha, incitado por Timas, mandó matar a sus hermanos porque supuestamente se "echaban" con sus mujeres (f. 43 v) y, de manera general, se dice que el cazonci mandaba matar a los principales que tomaban a alguna de sus mujeres (f. 21).