Baricha.

Sacerdote de Araro.

Después de haber presenciado el concilio de los dioses en el que se anunció que llegarían otros hombres a la tierra, la mujer de Viquixu regresa a Ucareo y allí la reciben los sacerdotes quienes le avisan a su marido. Entonces éste manda llamar al sacerdote de Araro llamado Baricha y al de Zinapequaro. A la mañana siguiente, Viquixu lleva a estos sacerdotes a "saludar" a la diosa Cuerauaperi (es decir a su mujer que estaba poseída por la diosa) quien les cuenta su visión. Muy probablemente fueron Baricha y el sacerdote de Zinapequaro quienes se encargaron de transmitir el mensaje a Zuangua, quien al verlos llegar los saluda diciéndoles: "madres, seáis bien venidas", porque así llamaban a los sacerdotes de la madre Cuerauaperi. Zuangua oye la historia y él mismo les cuenta a los sacerdotes un acontecimiento similar que había sucedido en tierra caliente. Entonces los sacerdotes regresan a Ucareo y le cuentan a Viquixu lo que les dijo Zuangua.